Documento sobre Desarrollo Infantil, que aborda las características generales del infante hasta los 6 años. El Pdf, útil para oposiciones de Psicología, detalla el desarrollo físico-motor, cognitivo y socioafectivo, incluyendo teorías de Wallon, Erikson y Piaget, y momentos significativos del primer año de vida.
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Oposiciones Educación Infantil Desarrollo Infantil TEMA 1: Características generales del niño y la niña hasta los seis años. Principales factores que intervienen en su desarrollo. Etapas y momentos más significativos. El desarrollo infantil en el primer año de vida. El papel de los adultos. Nerea Galan GaramendiINTRODUCCIÓN Este tema, junto con los temas 2, 3, 4, 5 y 18, forma el conjunto de conocimientos que debemos poseer los docentes en torno al desarrollo general de los niños y niñas. Pero, ¿por qué debemos tener unas bases sobre el desarrollo infantil? Pues bien, igual que un jardinero entiende las necesidades de cada planta para que pueda florecer, los maestros también deben comprender cómo crecen y aprenden los niños y niñas en las distintas etapas de su vida. Este conocimiento sobre los aspectos del desarrollo infantil nos permite adaptar nuestros métodos de enseñanza y darles el apoyo adecuado para nutrir el potencial de cada alumno. Sin esta comprensión, sería como intentar cultivar un jardín sin saber qué tipo de suelo, agua y luz necesita cada planta.
Para poder profundizar y abordar con perspectiva y rigurosidad este tema, he partido del libro DE ANTONIO MUÑOZ GARCÍA "PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO EN LA ETAPA DE EDUCACIÓN INFANTIL",1 ya que describe las diferentes áreas del desarrollo (física, motriz, afectiva, sexual, social, intelectual, lingüística) de los infantes de los 0 a los 6 años de una forma muy comprensible.
Aparte del libro, también he consultado y he tenido como referente la NORMATIVA EDUCATIVA VIGENTE, la cual debe ser conocida por los agentes educativos, ya que nos orienta sobre cómo ha de ser la enseñanza en esta etapa y qué aspectos debemos trabajar en el aula para fomentar el desarrollo global de nuestros alumnos.
Asentadas ya las bases de la importancia de conocer aspectos sobre el desarrollo infantil y conociendo cuáles son las fuentes de información que sustentan este tema, voy a pasar a desarrollar el primer epígrafe: LAS CARACTERÍSTICAS DEL NIÑO Y LA NIÑA HASTA LOS 6 AÑOS.
Es importante que los docentes conozcamos las características generales de nuestros futuros alumnos, ya que solo así podremos respetar los ritmos y estilos de maduración de cada uno de ellos. El proceso de enseñanza y aprendizaje debe adaptarse a estas características (personales, físicas, motoras, sociales ... ), y es por ello que debemos tenerlas presentes.
Para una mayor comprensión, las veremos por separado, agrupadas según los ámbitos del desarrollo infantil. 1 García, A. M. (Ed.). (2010). Psicología del desarrollo en la etapa de educación infantil. Ed. Pirámide. 2
Este desarrollo físico y motor de los 0 a los 6 años es el más significativo y visible. Es un periodo rápido y de cambio constante regido por LA LEY DE DISOCIACIÓN, según la cual el cuerpo del infante no crece en todas las direcciones al mismo tiempo ni en la misma intensidad. En este sentido, a nivel genérico, las partes del cuerpo del niño y la niña evolucionan de manera diferente, siendo lo más destacado la cabeza, que representa la cuarta parte de su tamaño corporal. Las piernas son cortas y los brazos largos y, aproximadamente hacia los 6 años, las piernas quedarán proporcionadas con el resto del cuerpo. Otro aspecto físico remarcable sería la DENTICIÓN. El primer diente aparece sobre los 6 meses, a los 2 años suelen tener la primera dentición completa y a los 7 años, se empiezan a sustituir por los dientes definitivos.
Y, ¿Cómo podemos estimular el desarrollo físico en estas edades? En los primeros meses de vida, podemos poner un tiempo determinado a los bebés boca abajo (tummy time) para que puedan fortalecer su cuello y los músculos del torso. También ofrecerles materiales que puedan agarrar y soltar con las manos. Cuando empiece a gatear, es interesante animarle a buscar objetos o juguetes para que vaya recorriendo mayores distancias y, una vez ya sepa caminar, darle alternativas más motoras como subir y bajar peldaños, montar en triciclo, jugar en parques, etc. Otra opción interesante es el yoga para niños, ya que las posturas les ayudan a mejorar la flexibilidad, el equilibrio, la coordinación y a fortalecer los músculos. Para ello, tenemos recursos como tutoriales de YouTube donde nos enseñan posturas de yoga basándonos en animales o cuentos con posturas de yoga para niños.
Este desarrollo motor se basa en las LEYES CEFALOCAUDAL Y PRÓXIMO-DISTAL: se inicia en la cabeza y se va pasando hasta llegar a las partes más lejanas (los pies), y también comienza en las partes más próximas al eje de la columna vertebral v se extiende hacia las zonas más distantes (los dedos). Desde el nacimiento hasta los primeros meses, los bebés pasan de una conducta refleja a un inicio de los primeros movimientos voluntarios. Estos primeros reflejos irán desapareciendo durante el primer año, excepto el del estornudo o el del parpadeo. Los reflejos más característicos son el de Babinski, el de presión, el de succión o el de la marcha automática. Otro aspecto importante durante este primer año es el hecho de pasar del grasping (reflejo con el que cierran la mano cuando un objeto toca su palma) a coger voluntariamente objetos hacia los 5 meses, hasta llegar al dominio de la pinza fina. El tono muscular también va variando a lo largo del primer año, desde una hipotonía total hasta poder aguantarse sentado solo hacia los 8 meses. Hacia el primer año, la mayoría comienza a gatear y a dar sus primeros pasos, marcando el comienzo de la locomoción independiente. Entre los 2 y 3 años, los niños mejoran su coordinación y equilibrio, permitiéndoles correr, saltar y subir escaleras. De los 3 a los 6 años, el desarrollo de la motricidad fina y gruesa se perfecciona, facilitando actividades como dibujar, cortar con tijeras y participar en juegos más complejos.
Y, ¿Cómo podemos estimular el desarrollo motor en estas edades? Para estimular la motricidad gruesa, es interesante ofrecerles actividades como gatear, caminar, subir escaleras, juegos al aire libre, correr, saltar y lanzar pelotas. Y para la motricidad fina, juguetes para apilar, rompecabezas sencillos y materiales para dibujar o modelar con plastilina. También podemos optar por crear circuitos de psicomotricidad, usar cuñas motrices, juegos con aros, etc., siguiendo los consejos de LAURA ESTREMERA (PSICOMOTRICISTA) QUE NOS PROPONE EN SU BLOG.2 2 Estremera, L. (marzo 2022). Pinceladas sobre psicomotricidad vivenciada. Laura Estremera Blog. www.lauraestremera.com 3
Para abordar este apartado, tomaré como referencia la nueva EDICIÓN REVISADA Y COMENTADA DE JUAN DELVAL DEL LIBRO DE JEAN PIAGET "LA PSICOLOGÍA DEL NIÑO". En el, se aborda el desarrollo intelectual de los infantes siguiendo los estudios de Jean PIAGET, que propone diferentes estadios:
Y, ¿Cómo podemos estimular el desarrollo cognitivo en estas edades? Desde el nacimiento podemos hablarles, cantarles y leerles o explicarles cuentos. A medida que van creciendo, los juegos de imitación, los juegos simbólicos (la cocinita, el carro de muñecas, etc.), los puzles, encajes, bloques de construcción, juegos de memoria y atención, etc., les fomentarán la resolución de problemas y la exploración sensorial. También es interesante ofrecerles actividades más artísticas (dibujos, moldeados, pintura ... ) para estimular su imaginación y pensamiento. Sin olvidar interactuar con su entorno y con otros iguales.
En cuanto al desarrollo afectivo, el bebé, desde el momento que nace, desarrolla el VÍNCULO DE APEGO entre él y las personas con las que interactúa. Este vínculo será la base de futuras relaciones con otras personas e irá evolucionando a medida que el niño avance en su desarrollo. Durante los 0 y los 3 años, los afectos y las relaciones que vive el niño con los otros están ligados con la satisfacción de sus necesidades vitales, pero poco a poco comienza a interactuar con otras personas.
Las personas más cercanas se convierten en figuras de apego e imitan sus conductas afectivas. Terminará aprendiendo a contener y autorregular las emociones gracias a la figura del adulto. Durante los 2 y los 6 años, su campo de actuación social se amplía considerablemente. A partir de los 3 años hasta los 6, las conductas afectivas del niño son reguladas por las figuras de apego. El niño quiere agradar a las personas que considera importantes y trata de imitar sus conductas y reacciones afectivas. Aparecen las emociones autoconscientes: vergüenza, orgullo, culpabilidad y envidia. Aparece también un nuevo tipo de afecto, la amistad.
Y, ¿Cómo podemos estimular el desarrollo socioafectivo en estas edades? Pues debemos crear un entorno seguro que fomente la confianza y el vínculo emocional. Desde el nacimiento, el contacto físico como abrazos y cariños, junto con la atención y la respuesta a sus necesidades, construyen una base de seguridad emocional. A medida que los niños crecen, es importante reconocer y validar sus emociones, enseñándoles a expresarlas de 3 Piaget, J., & Inhelder, B. (2016). Psicología del niño (ed. renovada). Ediciones Morata. 4