Diapositivas sobre las oleadas revolucionarias de 1820, 1830 y 1848, analizando la difusión del liberalismo y el nacionalismo en Europa. El Pdf, un recurso de Historia para Bachillerato, detalla las características del liberalismo político y su influencia en la creación de estados nacionales, incluyendo la situación en España y Portugal.
Ver más15 páginas


Visualiza gratis el PDF completo
Regístrate para acceder al documento completo y transformarlo con la IA.
LAS OLEADAS REVOLUCIONARIAS DE 1820,1830 Y 1848 La Revolución francesa y las guerras napoleónicas habían difundido por Europa las bases ideológicas del liberalismo. Pero, además, la idea de que la autoridad solo podía provenir de la Nación (Soberanía Nacional) asoció el liberalismo a la defensa de la creación de Estados nacionales. El Congreso de Viena rechazaba el liberalismo y el nacionalismo, y por eso las aspiraciones de los pueblos acabaron desencadenando las sucesivas oleadas revolucionariasCaracterísticas del liberalismo político
LAS REVOLUCIONES LIBERALES (1820-1848) Tres grandes oleadas revolucionarias recorren Europa entre 1820 y 1848. Las revoluciones de 1820 presentan unas características comunes:
España se convierte en un país liberal (1820-1823) Don Fernando VII, por la gracio de Dios y la Constitución de la Monenpa española, Rey de las Espuñas, y en su onseucio y contividad lo Regencia del Reino, nombroda por las Cortes generales y extraordinarias, a losdos los que las presentes vieren y entendicren, sobed: Que las mismas Cortes luan decretado y sancionado la siguiente: CONSTITUCIÓN DE CÁDIZ DE 1812 Fernando VII Rafael del Riego
Portugal Juan VI de Portugal El Coronel Sepúlveda Miguel I de Portugal
Siguiendo el ejemplo de todo lo que sucedió en España, en Italia hubo una situación parecida. Aunque no existía el "Reino de Italia" como tal, sí que hubo dos grandes reinos que participaron en las Revoluciones de 1820: el Reino de Nápoles y el Reino de Piamonte. Los movimientos revolucionarios fueron impulsados por sociedades secretas. El Reino de Nápoles, también conocido como el de las "Dos Sicilias", era el que más terreno abarcaba de todos los reinos de la península itálica y el más absolutista. Estaba gobernado por la casa de los Borbones, firmes defensores de este sistema autoritario. Fernando I El movimiento fue un éxito y Fernando I se vio obligado a firmar la Constitución que le propusieron los sublevados. Se trataba de una carta magna muy similar a la Constitución Española de 1812.El Reino de Piamonte reinaba Victor Manuel I, miembro de la Casa de Saboya y defensor del Antiguo Régimen. El monarca llevaba en el trono sólo 6 años, ya que regresó a Turín en 1814 debido a la derrota de Napoleón. El rey Víctor Manuel I, incapaz de controlar la situación, abdicó en su hermano Carlos Félix. El nuevo monarca firmó la constitución que elaboraron los sublevados liberales y así comenzó la breve etapa liberal dentro del Reino de Piamonte. Victor Manuel I Ambas revueltas, la de Nápoles y la de Piamonte acabaron por fracasar debido a la intervención extranjera. De forma muy similar a lo sucedido en España, los líderes absolutistas se reunieron primero en el Congreso de Laibach (1821) para finiquitar las aspiraciones liberales de Nápoles y Piamonte, respectivamente. En el caso de Nápoles, fue el rey Fernando I quien se dirigió a la Santa Alianza en busca de ayuda. Algo muy parecido a lo sucedido con Fernando VII con el Congreso de Verona. Sin embargo, el fin de las revueltas no fue sino el comienzo de las ansias nacionalistas dentro de Italia.
"Nosotros, descendientes de los sabios y nobles pueblos de la Hélade, nosotros que somos los contemporáneos de las esclarecidas y civilizadas naciones de Europa ( ... ) no encontramos ya posible sufrir sin cobardía y autodesprecio el yugo cruel del poder otomano que nos ha sometido por más de cuatro siglos ( ... ). Después de esta prolongada esclavitud, hemos decidido recurrir a las armas para vengarnos y vengar nuestra patria contra una terrible tiranía. La guerra contra los turcos ( ... ) no está destinada a la obtención de ventajas para una parte aislada del pueblo griego; es una guerra nacional, una guerra sagrada, una guerra cuyo objeto es reconquistar los derechos de la libertad individual, de la propiedad y del honor, derechos que los pueblos civilizados de Europa, nuestros vecinos, gozan hoy". Asamblea Nacional Griega, 27 de enero de 1822. Proclamación de la independencia de Grecia. ALBANIA MACEDONIA TRACIA Constantinopla Salónica Mar de Mármara EPIRO TESALIA IMPERIO OTOMANO ISLAS JÓNICAS (R. U.) Mar Egeo JONIA · Esmirna GRECIA SAMOS Atenas Nauplia Már Jónico DODECANESO CRETA Mar Mediterráneo Grecia Tratado de Adrianópolis (1829). La cláusula principal del tratado concedía a Grecia la independencia total frente al Imperio otomano Mar Negro
Entre el 25 de septiembre de 1808 y el 29 de septiembre de 1833 tiene lugar la victoria independentista de la América española. Las Cortes españolas renunciaron a sus posesiones en América en 1836 y autorizaron al gobierno para realizar tratados de paz y reconocimiento con todos los nuevos estados surgidos en el continente. Filipinas (hasta 1898) España HISPANOAMÉRICA Cuba y Puerto Rico (hasta 1898) Territorios perdidos entre 1815-1833 Territorios conservados por España La caída del Imperio español bajo el reinado de Fernando VII
LAS REVOLUCIONES LIBERALES (1820-1848) La segunda oleada revolucionaria se produce en la década de 1830. Es un proceso más complejo en el que se entrecruzan la defensa del liberalismo, el nacionalismo y el descontento popular provocado por las crisis económicas. El proceso revolucionario se inicia en Francia, la revolución derroca a los Borbones (Carlos X) e instaura una nueva dinastía: la monarquía constitucional de Luis Felipe de Orleans (Constitución de 1830) . El nuevo rey inicia una política reformista que beneficia a la alta burguesía pero que no dudaba en reprimir a los obreros, quienes tienden cada vez más al republicanismo. Francia accedió plenamente a la Revolución industrial con lo que las diferencias sociales entre la burguesía y el proletariado se agudizaron. La Revolución supuso acabar definitivamente con la dinastía de los Borbones. La nueva dinastía significaba la estabilización de la revolución. No obstante la agitación continuaba y el pueblo de París volvía a sufrir otra crisis económica en 1832. Los enfrentamientos entre las tropas y el pueblo eran inevitable. La burguesía inquieta, olvidó cada vez más sus principios liberales, adoptando una posición conservadora. El rey eludió sus promesas de democratización y las clases medias (periodistas, profesores, intelectuales) que podían haberle apoyado se fueron alejando del régimen orleanista. La Revolución de 1848 acabaría con él y llevaría a la proclamación de la II República. Luis Felipe de Orleans hizo una concesión a los republicanos al aceptar la bandera tricolor como símbolo de la nueva monarquía constitucional
LAS REVOLUCIONES LIBERALES (1820-1848) La gran triunfadora del ciclo revolucionario fue Bélgica, que consiguió independizarse del reino de los Países Bajos en 1830. La gran perdedora fue Polonia que hasta los tratados posteriores a la I Guerra Mundial no conseguirá su independencia. El liberalismo moderado diendo el sufragio censitario y prohibiendo las asociaciones obreras marginaba a las clases populares. A partir de 1848 los movimientos revolucionarios resurgieron casi de forma simultánea. La principal novedad es la irrupción de un proletariado que manifiesta ya una conciencia de clase y que es consciente de su miseria pero también de su fuerza: Sus peticiones se centrarán en el sufragio universal y la soberanía popular. Al liberalismo y al nacionalismo se une ahora el socialismo En el año 1848 se publica el Manifiesto comunista de Marx